Eliminación permanente del vello.
Tratamiento personalizado y supervisión médica: Puede utilizarse en todos los fototipos de piel. La piel más oscura (incluida la bronceada por el sol y con bronceado artificial) y una densidad mayor de pelo reducen la cantidad de enería posible que se puede usar. Este valor variará de una persona a otra y de una zona a otra del cuerpo. En estos casos se comienza con un nivel menor de energía, incrementándola en tratamientos subsiguientes, a medida que la densidad pilosa disminuye, de manera que se puede aceptar el aumento progresivo de enería sin molestias inaceptables o efectos indeseados.
Su avanzada tecnología permite disminuir el número de sesiones necesarias y el tiempo de los tratamientos.
Además de tratar la eliminación del vello de forma permanente, mejora la elasticidad de la piel en las zonas tratadas, proporcionando una sensación de piel suave y sedosa.
Tratamiento
En algunos casos es necesario rasurar la zona previamente a la aplicación del láser excepto en la zona facial que simplemente se recorta.
Tanto el paciente como el operador utilizaran gafas protectoras.
La piel debe estar limpia y libre de grasa, cosméticos y cremas.
El intervalo de sesiones y su duración es variable. Normalmente se recomiendan 5 sesiones.
Se debe cuidar la piel después del tratamiento en especial evitar la exposición al sol directa durante las primeras horas y aplicar crema descongestiva.
Durante la sesión es normal notar cierta molestia como quemazón, pinchazos o leve dolor. Una vez finalizada la sesión la zona aparece enrojecida y ese eritema puede persistir hasta el día siguiente.
Recomendaciones
No exponer la piel a rayos UV (exposición al sol o uso de leches de bronceado) o auto-bronceado durante los 3 días anteriores y posteriores al tratamiento.
No depilarse con cera, pinzas ni hilos (el afeitado o las cremas depilatorias si son aceptados) antes y/o entre los tratamientos.
No usar cremas decolorantes ni productos autobronceadores.
Informar si se está tomando alguna medicación
Cuando acuda al tratamiento no utilizar prendas muy ajustadas o ropa que destiñan o manchen la zona a tratar.
Mantener la zona limpia y seca.
Hidratarse bien bebiendo mucha agua
Proteja la piel contra la exposición solar.
No utilice cremas anestésicas.
